El Banco Habitual de los Previsores del Porvenir fue fundado en 1926.
Nacía íntimamente asociado a una empresa de seguros llamada Los Previsores del Porvenir.
Tenía que ver con una institución de dimensiones y metas modestas que, haciendo honor a su nombre, aspiraba a recoger el ahorro de las clases medias y bajas, fomentado los hábitos de economía y previsión, mezclando su tarea con la de la compañía de seguros.
Aunque fundado el Banco en una temporada de bonanza, próximamente comenzaron las dificultades: la Enorme Depresión de los años treinta, la Guerra Civil, la difícil posguerra.
El Banco Habitual sobrevivió e incluso medró en los años de la posguerra, independizándose de Los Previsores y forjándose una personalidad caracteristica de banco comercial cercano a la pequeña y mediana compañía.
No obstante, las dificultades siguieron hasta que, hacia 1953, apareció en su horizonte una figura que lo encauzaría, haciéndole crecer y comprar una personalidad muy propia.