El miedo a la desaparición, el amor, la pérdida del amor, la vejez, la poesía y la naturaleza de la ficción, las vivencias lumínicas e inenarrables: todo cabe en esta monumental obra. En su obra póstuma, el excepcional novelista uruguayo Mario Levrero se entregó a la tarea de escribir una novela en la que fuera con la capacidad de narrar ciertas vivencias extraordinarias, que él llamaba «lumínicas».
sin que perdiesen tal cualidad.
Una tarea imposible, según confiesa mucho más adelante, pero en la que se embarca con el «Períodico de la beca».
En todas y cada una de las entradas de este períodico, que recorre un año de su vida, el autor nos charla de sí, de sus manías, de su agorafobia, de sus trastornos del sueño, de su adicción a los ordenadores, de su hipocondría y del significado de sus sueños.
Capítulo aparte meritan sus mujeres, particularmente Chl, que lo alimenta y lo acompaña en sus escasos paseos por Montevideo en pos de libros de Rosa Chacel y de las novelas policiacas que lee de manera compulsiva. Opiniones:
«Levrero es el reverso corriente de Kafka, una sombra toqueteada de Camus en clave cómica».
Promesa López Parada, Babelia, El País «La experiencia radiante consistiría, simplemente, en cobrar conciencia, pese a todo. «En eso consiste el verdadero aprendizaje», escribe Levrero. «No entender que se conoce, y de repente entender. «»
Ignacio Echevarría «Esta novela es una invitación a dejar de encontrarse tanto en todas y cada una partes y perderse de una vez.
He comenzado a leerla hace unos días y no pienso finalizarla, al menos hasta que halle otro libro de Levrero».
Miguel Vitagliano